Como Siempre

Llevo ya 10 días en Europa. Recuerdo que la última vez que dejé España estuve casi un mes prácticamente aislado del mundo. Si de algo me arrepiento este año, es de haberme dado demasiada importancia. Llegue a convencerme de que mi país de residencia, mi vida profesional o mi relación sentimental eran factores que me definían como único y me hacían incomprensible al resto de personas de mi misma edad.

Cuando tocó arriesgarlo todo y empecé a intuir que las cosas no saldrían como había planeado, oculté mis problemas a la gente que me quería, no por orgullo sino para no decepcionarlos. Es increíble cómo a pesar de mis esfuerzos, los mensajes de aquellos que había apartado de mi vida empezaron a llegar poco a poco...

Es en el contenido de esos mensajes y las conversaciones donde está la reflexión más importante de este post.

A medida que fui volviendo a introducir a mi hermano, mis primos y amigos cercanos en mi vida, mi mundo se volvió a llenar de cosas secundarias que son imprescindibles. Al mismo tiempo, lo que parecía tambalear mi realidad pasó de largo.

Lo importante para ellos era que por fin me había crecido barba y que por mucho que lo intentase, el gimnasio no daba los resultados previstos. Volví a pasar horas discutiendo proyectos inviables para cambiar el mundo, a planear viajes y a escuchar música.

Retomando el aquí y ahora, si me preguntas que tal estos diez días las cosas fueron según lo previsto. Iago sigue resolviendo los problemas de toda la familia y Juan sigue encandilando a las señoras del Mercado de Motores, como siempre hace.

Miguel y yo descubrimos una nueva idea del millón de euros que añadir a una lista interminable. Luis ha vuelto a cambiar de trabajo y Marta sigue pensando que Pablo es igual de imbécil, así que siguen queriéndose lo mismo.

Volvimos a improvisar un plan que esta vez me llevo a Nottingham para ver el último concierto de Yellowcard. Sonaron exactamente igual que en sus discos, Marta me volvió a llenar de abrazos y Pablo me llamo cabrón unas 20 veces. Tampoco me dejo dormir con sus ronquidos que atraviesan hasta las literas.

Estos diez días he aprendido a vivir en una paradoja, a tomarme enserio cada minuto riendo, a apoyarme en recuerdos para dar pasos adelante en mi vida y a ver críticas como cumplidos si vienen de la persona adecuada.

He encontrado lo más importante oculto en las cosas pequeñas y he empezado a saborear los “como siempre” tanto como las primeras veces.

Sobre todo, he aprendido a dejar de intentar medir los sentimientos, o condicionar la felicidad a grandes éxitos y momentos extraordinarios.  Descubrí que si mi mundo gira, es gracias a un eje fijo que se oculta en las personas que siempre estarán allí y en aquello secundario que no cambiará con el paso del tiempo.

 

"We were singing 'til our voices were gone
And I was falling hard
You were barely hanging on
And now I wanna chase forever down
With you around"

El refugio y su guardián

He vuelto a Galicia durante un mes por varios motivos. El principal es que egoistamente necesitaba que el tiempo se congelase, descansar, leer y preparme mentalmente para un 2017 que va a estar cargado de emociones y responsabilidad.

Creo que hay un solo lugar en el mundo que cumpla este objetivo. Es un lugar con vistas al puerto de la Coruña, que huele a libro antiguo y tiene todos los clásicos del mundo. Solamente se enciende la televisión para ver "Se ha escrito un crimen". Allí suelo quedarme dormido temprano mirando posters de los años 80. Por las mañanas escucho las noticias en una radio antigua y desayuno colacao con espuma, zumo y tostadas con azucar y mantequilla. Es la misma rutina en etapas claves de mi vida desde que tengo uso de razón.

Lo mejor de este refugio y lo que lo hace tan especial es la compañia. Es alguién que representa mi forma de ver una generación entera. Eso significa que es a ella a quien agradezco regalos como sentirme seguro, tener siempre la nevera llena y libertad para escribir sobre politica o lo que me apetezca por muy polémico que resulte.

Volviendo a la protagonista del post,  a simple vista se trata de una mujer bien vestida, sin excentricidades aunque centrada en los detalles y algo presumida. Si tienes la suerte de entablar conversación unos minutos con ella, descubrirás que es también una persona increiblemente culta y sobre todo sensible.
Tiene la capacidad de empatizar contigo para luego reducir tus miedos, complejos y preocupaciones a cualquier anécdota, a lo bien que te queda el pelo corto o lo poco que estás comiendo hoy. Aunque vive permanentemente preocupada siempre es por la gente que quiere, nunca por ella misma...
Quizás por eso le cuesta echar la vista atrás y hablar sobre si misma, pero cuando lo hace te transporta a un lugar increible.

Se trata de un pais muy distinto al que te cuentan en libros, prensa y peliculas. Yo lo imagino como un sitio gris y lleno de sacrificios, pero que se fue pintando a golpe de nobleza, valores y perdón entre bandos por amor.

Esta semana mi tiempo se congeló entre cartas antiguas a mano, examenes de revalidas y fotos en blanco y negro. Entre ellas, descubrí que puedo comerme el mundo...
Llevo en la sangre la inteligencia de un matemático rojo encarcelado y la nobleza de un franquista que trabajaba los domingos para que sus hijos fuesen libres y felices.
También la sensibilidad de una peluquera que volaba a Paris a traer tendencias y el valor de un ingeniero que escapó de la Cuba de Fidel Castro por darle un futuro a su hija.

En mi refugio aprendí que he tomado la decisión correcta y que lograré estudiar un Master y trabajar al mismo tiempo. Cuando empezamos a abrir cajones, me emocionó saber que tengo una abuela que estudiaba por la noche a escondidas, cuando sus bebes no lloraban y nadie creia en ella.

Este post es la historia de una mujer que terminó siendo profesora en las mismas aulas donde estudió Pablo Picaso y creando un refugio increible.
Hoy me prometí a mismo tener claras mis prioridades en la vida y mantener sus valores. Solo así, en poco tiempo, podré volver a pintar mi hogar igual que lo hizo su generación hace ya 80 años.

 "piensa que el futuro es una acuarela y tu vida un lienzo que colorear"

Personas, nombres y apellidos.

Vamos a romper el hielo con una adivinanza... 

¿Qué tienen en común el Aeropuerto de Dubai, Gran Vía y Marineda en la Coruña durante cualquier fin de semana y que cambia radicalmente en los próximos 30 días?
 
Los tres lugares en cuestión están permanentemente saturados. Hablamos de masas que te engullen y te arrastran. Se trata de grupos totalmente heterogéneos y a menudo sin mucha relación entre si... 

En Diciembre cualquiera de estos tres lugares se llena de personas. Tengo la indiscreta manía de quedarme embobado viendo las caras y los gestos, las miradas y la forma que cada uno tiene de interactuar con el entorno en estas fechas. Si sabes disimular tan bien como yo y te fijas atentamente, los anuncios, las luces y la decoración pasarán a un segundo plano.

Porque hablando de fijarse, Navidad es ver más guapo a todo el mundo. En mi caso, es mi abuela Yaya peinándome y Okeka planchándome el traje por cuarta vez. También son Anabel y Claudio emocionados viendo a mis primas estrenando vestido para salir en fin de año, o mi padre diciéndole a mi madre que todo le queda bien cinco minutos antes de la cena.

Navidad es ver el trabajo de otra manera. Son médicos, como mi vecina Conchi o mi prima Paloma, haciendo guardias incluso mal pagadas. Es Julio Novoa decorando su clinica y cada autónomo decorando su negocio. Es mi hermano Jorge construyendo potabilizadoras en Timor Oriental en lugar de salir de fiesta. Navidad es cada hora de estudio para no decepcionar a tu familia. Son tanto las pagas extra que se van en regalos, como cada euro que un empresario pierde por concederlas.

Navidad es sobrellevar el dolor. Es Humbe y Carolina secándose las lagrimas y viniendo y cenar con nosotros de luto. Es la cabalgata de Reyes en Ferrol y que Franchón aún invite a tomar roscón en su casa.

Navidad es viajar. Es hacer 28 horas en avión con un dedo roto. Son los hijos de Guillermo y Marta volando hacia Adelaide. Es cruzar España desde Sevilla en coche o un pasaje en familia a Mexico DF. 

Navidad a veces es distancia. Es el Skype de Luis abierto para hablar con su madre en Venezuela. Son las hijas de Ketty, tan contentas de conocer a su nuevo hermano que olvidan que sus abuelos se han vuelto a Ferrol.
Navidad es Ángela poniendo mesas a sus amigos embarazada. Es cada mirada que Johan lanza a la habitación recién decorada antes de acostarse. Es sentirse afortunado de estar con la persona que quieres de verdad sin importar lo que el mundo piense o las dificultades.

Navidad son nombres y apellidos porque es tener fuerzas para volver a ser quienes somos. No se mide en regalos caros o baratos, ni momentos concretos. No es ser mejores, ni extraordinarios. Es simplemente demostrarle al mundo, al menos durante 30 días, que tenemos el valor de luchar y sacrificarnos por otros más que por nosotros mismos. 

Si observas como yo, verás que en Navidad todo se llena de personas. Estés donde estés, creas en lo que creas, no hay nada más humano que Diciembre con aquellos que sacan lo mejor de ti.

20 cosas sobre Australia que no sabias

 A todos nos suena bien Australia. Suena a lejos, a playa y surf, a gente rubia, koalas y canguros...

Con 18 años no tuve ninguna duda en decir sí, cuando mi padre sometió a votación la decisión de trasladarnos a vivir aquí una temporada. Casi cuatro años después (con una etapa de vuelta a Madrid) sigo pensando que fue la mejor decisión posible, pero hay muchas cosas sobre Australia que te sorprenderán si algún dia vienes a hacerme una visita.

Flora y Fauna


1. Los tiburones si que existen, se acercan a las playas a veces y son peligrosos. 
Aunque no es lo más común del mundo, al profesor de inglés de mi hermano Jorge se lo comió un tiburón. Esta semana se han avistado 18 tiburones en las playas de Adelaide y existe la regla no escrita de nunca ser el bañista más alejado de la orilla.

 2. En Australia no se puede matar ningún insecto, bicho o animal.
En la ciudad no hay serpientes pero si varios tipos de arañas, incluida una de espalda roja que solo he visto dos veces en mi vida pero que puede resultar mortal. Cualquier australiano tiene la obligación de depositar la araña en cuestión en el exterior, o como en el caso de algún amigo mio, dejarla tranquila para que pueda comerse a los bichos.

3. Los koalas en realidad son bastante malvados
Aunque tienen todo el flow, los koalas que están en varios arboles alrededor de la ciudad no son animales precisamente cariñosos. Muchas veces las casas en las colinas se alquilan con koala en árbol incluido, pero no debes intentar domesticarlos bajo ningún concepto. Según mi amigo Tom, lo único que conseguiras es que te arañen a ti, aterroricen a tu gato y roben los objetos dorados de la casa y los escondan en su arbol.

Demografia

 4. Australia es el cuarto pais con mayor tasa de obesidad del mundo. Dejando a un lado el crecimiento de la comida Healthy entre la gente joven, según datos oficiales el 28.3% de los adultos australianos padece sobrepeso. Adios a tu imagen de surfistas...

5. Los australianos tienen problemas de natalidad. Obviando el hecho de que Australia tiene una dimensión similar a Estados Unidos y la mitad de población aproximadamente que España, a los australianos no les gusta demasiado tener hijos. De hecho el gobierno da puntos extra para conseguir un visado de trabajo si te encuentras en "edad fertil".

Economia

6. Los salarios son desproporcionadamente altos. Por no hacer este post un articulo de wikipedia, solo decir que un médico australiano gana al menos 200.000 dolares al año, un profesor de Instituto 120.000 dolares al año. 

Mientras en España se presupone que es aceptable tener a becarios sin cobrar, en este pais con un titulo universitario no se aceptan salarios por debajo de los 55.000 dólares al año aún sin experiencia previa, en ciudades como Sidney se acercan a los 70.000 dólares. 

Si tienes poco tiempo, el salario en un bar de es unos 20$/hora, pudiendo llegar a 40$/hora en puestos temporales en trabajos de oficina... 

7. El paro en Australia es residual. 
Dicho de un modo simple, si no trabajas es porque no quieres. El 5,2% de paro se explica porque hay poca protección frente al despido. Tampoco hay ningún miedo a perder tu puesto de trabajo, lo que se traduce en problemas de falta de compromiso por parte de los trabajadores en muchos casos. 
Un australiano no hace horas extra por amor a una empresa aunque tenga consecuencias economicas para la misma.

8. Ser pobre está mal visto. 
Es una consecuencia derivada del punto anterior, pero al no existir paro real, hay la creencia más o menos expresada en voz alta de que un pobre en australia es lo más parecido a un vago. No es que se vea como alguien inferior o con odio, pero no suele existir condescendencia por alguien que no produce por si mismo y por tanto no existe gente pidiendo en la calle.
Eso suelen extenderlo hacia otros paises erroneamente, tachando a los españoles de "echar demasiadas siestas" un par de veces en el periódico, lo cual cabreó de sobre manera a mi santa madre.

Educación

9. Si has nacido en Australia, un titulo universitario es una elección, no una necesidad.

Aquí nadie asume que estás estudiando una carrera. La Universidad en Australia es mucho más cara que en España, incluso en proporción a los salarios y de manera similar a Estados Unidos no es financiada por tus padres. Supone contraer deudas con el gobierno australiano y tambien madurar mucho mas rapido porque a los 18 años se cierra el grifo. Un estudiante es el que le sirve las copas a los que no estudian, pero que a su vez trabajan muchas horas entre semana.
Personalmente y tras haber probado ambos sistemas educativos, en Australia te lo pasas peor, no hay capeas, ni perreo, ni jueves locos... pero al final todos tenemos que aprender lo mismo y tu vida es mucho más tranquila y estable aqui. 
 
10. Es más facil subir de curso que repetirlo en el colegio.
Pues eso, tal cual. El sistema de elección de asignaturas rompe con la creencia de que todos tenemos que saber de todo. Si no llegas a un nivel determinado en Física no tienes porque tener pesadillas con Newton o pensar que eres inútil. Si no sabes de Arte tampoco tienes que copiar las láminas... y si tienes la capacidad o la inquietud de ir un paso por delante no tienes porque aburrirte en clase.

11. Los estudiantes tienen que llevar sombreros como parte de su uniforme en verano y las faldas son hasta la rodilla.
Se explica con fotos, pero basicamente tiene que ver con que los australianos afirman que el cancer oficial del pais es el de piel, debido al alto nivel de radiación solar si vives aqui toda la vida. 

Sociedad

12."Trying too hard" está mal visto.

Quizás es uno de los factores más importantes para entender la cultura australiana. Se basa en el sentimiento de que este es el "Lucky Country" y por tanto que sin esforzarte al limite tienes todo lo necesario para ser feliz. 
Se traduce a todos los contextos,  está mal visto trabajar demasiadas horas en tu empresa, hacer regalos excesivos o impresionar demasiado a una chica en la primera cita... 

13. Los sentimientos solo después de mucho vino o cerveza.
Incluso si un australiano es tu mejor amigo, y se le llenan los ojos de lagrimas al despedirse de ti evitará tener conversaciones profundas contigo. Eso incluye vetar la palabra amor, politica o muerte de su vocabulario. Después de mucho tiempo observando creo que el motivo es que ni saben como ayudarte, ni quieren preocuparte con sus propios problemas. Tienen la filosofia de que lo que no cura el tiempo, lo hace un dia de "lovely food" y "lovely weather" y sobre todo "lovely wine".

14. Todos te preguntan y a nadie le interesa tu vida.
Este es el efecto contrario a España. En la peluqueria las preguntan incluyen en que trabajas, donde vives y que coche conduces, así que imaginate una cena o reunión con nuevos amigos...
Lo curioso es que a la semana siguiente pueden volver a preguntarte lo mismo. Lo hacen por educación pero realmente no les puede dar más igual.

En España tengo la sensación de que todos sabemos todo de todos aunque nunca le preguntemos... y si no, observa a las amigas de tu abuela, o a la vecina del quinto en el ascensor.

15. El gen competitivo es a través de apuestas.
Los australianos, como los ingleses, lo apuestan todo. Esto incluye caballos, futbol, quien puede beber más cerveza y si el semáforo cambia en 5 segundos. Todo el mundo habla de las apuestas que ha perdido así que tienes que haber pocos pero auténticos expertos apostando... yo no soy uno de ellos así que intento mantenerme al margen.

Dia a dia

16. Todo va por la izquierda (no solo los coches)
Cuando llegas a Australia tienes más peligro andando que en coche conduciendo. Si bien el tráfico y las señales te guian, un lunes temprano se te olvida que los peatones andan situandose al revés que España. Si no estás atento puedes pasarte una calle entera chocandote con gente de frente y pensando que el mundo está en tu contra desde primera hora de la semana.

17. Las tiendas y el mundo amanece a las 7:00am y cierra a las 5:00pm. 
Para mi como se mantienen las tiendas sigue siendo uno de los grandes misterios de este pais, ya que abren solo hasta las 5:00pm, una hora después de terminar el trabajo... suele haber más empleados que clientes siempre excepto los jueves que abre algo más tarde.  
Así son las cosas y así se las hemos contado.

18. Cuidado con los niños
En Australia se ven pocos bebes por la calle, pero hay una obsesión con la pederastia. Esta mal visto hacerle carantoñas a un bebe desconocido y parar a un bebe por la calle por muy mono que te parezca es impensable. Aunque es un pais totalmente seguro no hay niños solos jugando en plazas o parques. El asunto llega al siniestro punto de poner el culito de los bebes en los anuncios de pañales pixelado.
 
19. El pan es un bien de lujo
Antes hemos hablado de los salarios pero no de los precios del dia a dia. Si bien el aceite de oliva puede ser más barato que España y otros muchos bienes similares, existe un producto de lujo que mata a cualquier gallego.  La barra de pan están a 5$ de media y muchas veces ni siquiera está recién hecho.

20. Healthy Life
La gente joven recientemente tomó buena nota de el problema de obesidad. 
La coca-cola en muchos sitios es "orgánica", los gimnasios están llenos y no tienes likes de verdad en tu instagram hasta que subes tu pasta de tofu vegetariana. Todo suena divertido hasta que tus amigos te despiertan a las 7:00am el domingo para ir a correr a Mount Lofty... una vez y no más porque las constumbres de dormir el domingo hay que hacerlas respetar incluso en la otra punta del mundo.

Para terminar, me gustaria dar las gracias a los casi 3000 visitantes de Cartas para C en este mes y medio de aventuras, sin ningún tipo de promoción más alla de personas que comparten mi forma de ver el mundo.
Tanto si sois gente conocida como si no, tengo que agradeceros lo mucho que me habeis acompañado en un etapa breve pero muy especial en mi vida, justo antes de volver a lanzarme al vacio de nuevo.

Os mantendré informados.

Gracias por ser de oro

Lo primero que se me viene a la mente es Ferrol, cientos de conciertos en el escenario de un club y el sonido del oceano. ¿Existe algún sitio mejor que el de nuestro recreo, bailando rodeado de amigos como Humbe, Marisa o Julia y de ángeles como Maria?

Hoy no era buen momento para escribirte un post, y sin embargo tenia que darte las gracias...

Gracias por demostrarme que la vida es cuestión de prioridades, por hacerme valorar más un óleo de mujer con sombrero o la estatua de un jardín botánico que cien perlas ensangrentadas o un mundo tras el cristal de la televisión.

Gracias por exigirme, por enseñarme que siempre tengo que ponerme del lado de los inocentes, aunque sea una lucha de gigantes. No sirve de nada vivir en el limite del bien y del mal o poner excusas. Da igual que sean malos tiempos para la lirica o que hoy no me quiera levantar.

Gracias por enseñarme a valorarme a mi mismo. Por recordarme que no tengo que hacer sufrir a cualquier mamón que me cruce, pero que nadie me puede dejar temblando. Que ante cada feo, tengo que ser fuerte pero formal. Que siempre perdone y no tenga veneno en la piel.

Gracias por esperarme despierta 19 dias y 500 noches. Si nunca bebí hasta perder el control aunque visitara cientos de bares,  fue porque cada vez que llegaba a casa transformabas las noches de bohemia en alegria... Nos daban las diez y las doce hablando de la vida, de chicas de colegio y sobre todo de que siempre hay un precio por cada error que cometemos.

Gracias por agarrarte a mi una décima de segundo después de que me dejasen el corazón partido.
Gracias por decirme que cuando brille el sol de nuevo no deje de regalar rosas, ni de ver este mundo raro a mi manera porque las buenas chicas existen.
Sé que algún dia encontraré a mi princesa, igual que papa te encontró a ti hace 25 años.

Gracias por hacer mi vida la canción más hermosa del mundo. Aunque tu no lo sepas, hoy me acostaré soñando que en otra vida, en otro mundo, pero todo siempre será mejor a tu lado.

Feliz cumpleaños mamá. Estás en la edad de oro, así que disfrutala al máximo.

La generación egoista

Me falta mucho que vivir y que sufrir para entender la vida del todo. No pago las facturas en mi casa, no tengo una familia que dependa de mi. He crecido rodeado de internet, de información rápida y fácil de acceder y de viajes cada vez más baratos. He podido estudiar en una gran Universidad.
He llegado a los 22 años siendo egoistamente feliz.

No sé lo que es una Guerra Fria o un conflicto armado en mi frontera. A nadie de mi entorno le han insultado publicamente por su color de piel, religión, condición sexual o por ser extranjero. Jamás me he sentido amenazado. He llegado a los 22 años viviendo egoistamente seguro.

Yo no he decidido que Inglaterra se aisle de Europa o que Estados Unidos decida cerrar sus fronteras al mundo. No decidiré los cambios políticos que se avecinan en otros paises Europeos. No pienso llorar o patalear, ni convencer,  porque hasta hace seis meses me he dedicado a disfrutar del mundo egoistamente.

Pero como buen egoista, no modificaré mi conducta facilmente. Si he crecido sin miedo, no pienso temer a aquellos que insulten o generen odio. Si he accedido a cualquier información en un click no me parará la censura. Si he viajado por todo el mundo, la gente será bienvenida en mi casa. Si he tenido el privilegio de formarme no voy a claudicar contra la ignorancia.

La vida son ciclos, así que vuelve al primer parrafo...
Estoy seguro de que mi generación sufrirá en los próximos años pero también que tarde o temprano pagaremos facturas y habrá familias que dependan de nosotros. Llegado ese punto dejaremos el egoismo a un lado y decideremos que mundo vamos a dejar a nuestros hijos.

Hoy le pregunté a mi hermano de 18 años que opinaba de Trump y como buen milennial respondió egoistamente. Me dijo que no tenía tiempo para hablar de eso, porque tiene examen de programación el lunes. Está preocupado por su viaje a Timor Oriental para construir filtros de agua potable en tres semanas. También contento por ser aceptado para un programa de liderazgo en Alemania en dos meses.
 
No lo he admitido hasta ahora, pero mi hermano pequeño, la biblioteca llena esta tarde y estos dos gráficos me han hecho dormir mejor esta noche.

 

Cuando mojarse

Dicen que los gallegos somos indecisos, poco concluyentes y que igual que te decimos una cosa te decimos la otra... tendrá que ver con el tiempo, es dificil mojarse cuando siempre tienes un paraguas bajo el brazo.

Como experto en lluvias os diré que nunca me importaron las tormentas, o incluso los dias enteros cayendo gotas contra el cristal. Aunque evite las trombas sé que a todos nos toca mojarnos de vez en cuando, incluso si vives rodeado de canguros y playas... quizás saber escoger el momento adecuado es el atributo que más valoro en una persona. 

Hablando de lluvia pesada, no soporto a los niños que se mojan cuando todo el mundo sabe que llueve. Del mismo modo existe quién se lanza a dar su opinión sobre lo que para ellos y su mundo es obvio sin ni siquiera mirar por la ventana...

Juzgar el valor de una persona en base a si es gordo o flaco, feo o delgado, hombre o mujer, de izquierdas o de derechas, si lleva la falda larga o corta o si le gusta el heavy metal, Operación Triunfo, Dostoievski o Gran Hermano no solo es infantil, sino que en el fondo puede acabar afectando a tu salud igual que cualquier tarde de lluvia en invierno.

Pero si hay una lluvia peculiar en mi tierra es el "calabobos", esa lluvia fina y persistente que llega frecuentemente en los momentos más inoportunos, se sale de tu radar y te moja hasta los huesos.  No es espectacular, ni llamativa. La gente no saca fotos de ella aunque forme parte de su dia a dia.

Para mi los valores de una persona se definen en estas situaciones. El valor no está en lo obvio, se oculta en la rutina con tu pareja o tu familia, en defender a un amigo o incluso un enemigo cuando nadie mira, en atacar la injusticia con pequeñas acciones y en seguir de camino al trabajo aunque estés calado y con frio.

Nadie deja de salir de casa por miedo a una lluvia inesperada. No mojarte por tus ideales es tan absurdo como buscar ser feliz sin tristezas, placer sin sentir dolor o amor sin momentos duros. El sol solo se echa de menos cuando llueve, te lo dice un gallego para quién la lluvia solo fue arte cuando empezó a salir el sol en Australia.

"Ella es la chica más triste que me encontré jamás,

ella es tan guapa que hasta al mar hace callar..."

¿Con quién?

Creo que las mejores historias pasan desapercibidas. Esta en concreto no ocurrió en una capital mundial precisamente, empieza en Štítná nad Vláří y termina en un lugar mágico llamado Valdoviño.

El primer lugar se trata de una región de escasos dos mil habitantes en la República Checa. Es importante porque allí se conocieron y se enamoraron Lukas y Sophia, nuestros dos protagonistas.
 
Después de casí 5 años sin saber de mi amigo checo, nos reencontramos en Barajas. A los pocos minutos me preguntó cuando viajariamos en coche a ese lugar del que tanto le hablaba en persona. Estaba impaciente por visitar ese paraiso llamado Galicia.
Fue un momento algo incómodo. No era verano y su presupuesto no les permitia más de 3 o 4 dias de aventuras. Además la lista de sitios que visitar en Madrid era casi interminable...

Lo intenté todo, le enseñe el tiempo en el norte, le dije que tendrían que salir en tren en mitad de la noche para llegar de vuelta. Hasta le ofrecí ir a ver un partido del Real Madrid, pero Lukas me dijo que siempre le gusto más el Superdepor y ante eso no hay argumento que valga.

Al llegar a mi casa por la noche y bajando las maletas Lukas me preguntó cuando podriamos verlo. Yo supuse que se referia al estadio, el sonrió y me dijo que habían esperado toda una vida para ver el mar por primera vez.

Así fue como un viernes de finales de Septiembre, después de desayunar chocolate con churros y con el cielo cubierto de nubes llegamos a Valdoviño.

Un sitio bastante top la verdad

Lukas y Sophia se cogieron de la mano, abrieron mucho los ojos y bajaron a la playa casi hipnotizados. De la emoción olvidaron la camara y tras volver a por ella descubrí que se habian atrevido a sacarse los zapatos. Todo un logro...

Me relajé y mientras disfruté de las vistas, de los abrazos y los tropiezos, de las risas y de los ojos llorosos de Lukas, también empecé a pensar...

Vivimos en un mundo donde todo tiene que llegar por primera vez rápido, intenso y perfecto.
Pensamos constantemente en el "timing". A menudo nos equivocamos de planteamiento, barajando si seremos demasiado jovenes o demasiado viejos, si es el lugar o el momento indicado...

No recuerdo la primera vez que fui a la playa, pero si que la primera vez que entré en una piscina fue con mi abuelo, quizás el mismo dia en que mi abuela me corto el pelo por primera vez. Mi primer amigo fue mi hermano y mi primer héroe mi padre. Mi primera profesora, quien me leía a Calderón de la Barca haciendome sentir extraordinario, fue mi madre...

Párate a recordar tu primera vez, estoy seguro de que tu mente también se llenará de las personas que estaban a tu lado. Descubrirás que la magia no está en el donde o el cuando. A fin de cuentas, como me demostraron Lukas y Sophia, la única pregunta importante es con quién decides compartir tu propia historia.

Y el mundo nunca se quedará sin astronautas

Ya que la semana pasada hablamos de identidad, se sincero. Tu tampoco querias ser ingeniero, ni economista, ni abogado, ni rico, ni exitoso... Antes de descubrir el significado de todas estas palabras querías ser médico para curar, profesor para enseñar o, tal vez como en mi caso, astronauta para tocar lo inalcanzable.

Es interesante como todos los adultos valoramos la inocencia de los niños, los asociamos con un ser totalmente puro y por tanto carente de ambición... en mi caso también es paradójico. Yo, versión Carlitos, lo que más deseaba del mundo era llegar a las estrellas.

Cuando era un niño, me daba miedo la oscuridad de mi habitación pero no la noche, porque el cielo se llenaba de luces. Sé perfectamente que me perdería en mi propia casa, pero no en el lugar más aislado del mundo porque conocía las constelaciones. Llegaba a todo el mundo por la cintura, pero estiraba la mano para ver si podía tocar la luna.

 Esta semana me dió por pensar en los niños y gente joven de España, aqui y ahora... en ellos y en todas las familias que tengo a mi alrededor.

Casi nadie en mi pais tiene fuerza para ser ambicioso y no es para menos. Desde hace 8 años, todo en España es un poco más triste y un poco más viejo a como lo veo en los videos de mis padres.
Se respira en el aire, se ve en los gestos y nos ha afectado a todos. No solo el 22,2% de personas en riesgo de pobreza, las que han perdido su trabajo, o los que hemos tenido que emigrar a un extremo del mundo.

Y sin embargo, quiero que valores lo que has logrado. Mira a tus hijos, hermanos pequeños o nietos. Recuerda que eres un héroe por seguir luchando por ellos a pesar de todo.

Cuando te preocupes por su futuro y no duermas bien, abre tu libro de Historia. Piensa el odio que vivieron los niños que hicieron de España una democracia y en su pobreza antes de trabajar para convertirnos en uno de los paises con mayor calidad de vida del mundo.

Menos de 30 años después de 1940, pisamos la luna. Sin importar el problema ten la cabeza alta... recuerda que no hace mucho lo hacías siempre, porque incluso cuando llueve, nunca sabes que figuras esconden las nubes. Incluso si está oscuro, gracias a tu esfuerzo el mundo nunca se quedará sin astronautas.

Identidad

Todos nos vemos únicos frente al espejo, mejores o peores, más o menos guapos... Ese algo nos construye y nos daña. En ocasiones nos hace llegar a metas aparentemente inalcanzables, a crear caminos y a inspirar nuevas rutas a nuestro alrededor.
Ese mismo sentimiento también puede hundirnos, haciendo nuestros miedos y problemas tan complejos que parecen inabarcables, tan únicos que carece de sentido expresarlos en voz alta.

¿Te has parado a pensarlo? ¿No te parece casi magia cada vez que te sientes especial?

Si crees que la sociedad no entiende tu forma de ver el mundo, es que precisamente tienes la capacidad de moldearla. Tiéntate a compartir ese sentimiento con la gente que te quiere, con aquellos que valoran tu identidad y están dispuestos a enriquecerla y pulirla.

No dejes que tu película no se ruede por ir contra lo establecido, que tu canción no se escuche porque la creas desafinada o que tu texto no se lea porque este lleno de manchas y tachones.

En algún lugar, casi siempre más cerca de lo que creemos, hay alguien a quien tu luz no ciega sino que ilumina. Solo tienes que entreabrir la puerta y no dejar de sentirte irrepetible.